Hablemos de otra aventura interesante y aterradora en la vida automotor. Recién leí este artículo en Jalopnik que probablemente te haga agradecer tu cinturón de seguridad. #SafetyFirst Un hombre estaba extrañamente conduciendo su van con el portón trasero abierto, lo que ya es un poco raro. Pero luego, su jornada se pone aún más extraña cuando se ve literalmente expulsado de su vehículo durante un aparente accidente. Sí, leíste bien, ¡fue expulsado del carro! No estoy seguro de cómo sucedió exactamente – ¿Estaba sentado en la parte trasera? ¿Estaba tratando de alcanzar algo en la vía? ¿O simplemente no tenía su cinturón de seguridad puesto y salió disparado por el parabrisas trasero en un impacto? Sin embargo, lo impactante es que el hombre simplemente se levanta y camina como si nada. Un verdadero milagro, ¿No les parece? Es cierto que podemos disfrutar del humor en la peculiaridad de esta situación, pero creo que el verdadero mensaje aquí es: ¡Usa tu cinturón de seguridad! Cuando revisas las estadísticas de accidentes de tránsito, es impresionante ver cuántos resultan en lesiones graves o incluso la muerte, pero podrían haberse evitado con el simple acto de abrocharse el cinturón. La realidad es que un cinturón de seguridad puede ser la diferencia entre la vida y la muerte en un accidente. Reducen el riesgo de muerte en un accidente en un 45%, y de lesiones moderas a críticas en un 50%. Aunque no pueden evitar un accidente, pueden marcar una gran diferencia en sus consecuencias. Como entusiasta del automotor, siempre estoy interesado en los avances de la seguridad vehicular, y es increíble cuánta tecnología se dedica a salvaguardar a los conductores y pasajeros. Desde airbags y sistemas de frenado avanzados hasta sistemas de advertencia de abandono de carril y cámaras de visión trasera, la industria automotriz ha hecho grandes avances para proteger a las personas en la carretera. Pero todas estas innovaciones son inútiles si no aprovechamos las más básicas. Así que, por favor, no importa qué tan buen conductor creas que eres, no importa cuánta prisa tengas, no importa cuánto te moleste el cinturón de seguridad: abróchatelo. De este incidente podemos aprender algunas lecciones: Primero, siempre debes mantener tu vehículo en buen estado y hacer las modificaciones necesarias para que las partes como el portón trasero permanezcan cerradas mientras está en movimiento. Segundo, aunque el hombre parecía relativamente ileso después de ser lanzado de su vehículo, esa no suele ser la norma. Por ello, recuerda siempre llevar puesto tu cinturón de seguridad, no importa cuán corto sea tu viaje. Y finalmente, aunque parezca un cliché, la seguridad siempre debe ser nuestra prioridad número uno al conducir, ¡En serio! #ConduccionSegura
Juan Mecanico
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